jueves, 11 de febrero de 2010

MARGARITA



Sí, está linda la mar y el viento lleva esencia sutil de azahar. Y me transporté a mi infancia y allí estaba, sobre tus rodillas, imaginando a cuatrocientos elefantes a la orilla de la mar. Y ese microrelato me lo ha recordado. Y es que el Nilo y Nila siempre llevarán magia y luz a las orillas. Y Margarita, Anita o Elenita siempre te querrán, abu. Que para eso están las nietas, para ser poetas con coletas y duendecillos de palabras. Nos guardamos la antología para contarla a los que vendrán.

Y si la princesa está triste,
¿qué tendrá la princesa?, 
que solo con tu sonrisa
se alegra todo el planeta.

Tiene miedo, tiene sueño,
no tiene ganas de nada,
que la princesa del cuento
se fundió ya en tu mirada.